¿Qué significa emigrar y emprender con Speed Queen en España? Magda nos cuenta su historia


Entrevistamos a Magda, una emprendedora venezolana que recientemente emigró a España y decidió invertir en una lavandería de autoservicio Speed Queen. Lee su entrevista.

ILR: Buenos días, soy Inés del equipo de Speed Queen International y hoy entrevistamos a Magda, emprendedora y propietaria de una lavandería en Canarias. Buenos días, Magda, ¿cómo estás?

Magda: Buenos días Inés, encantada de estar hablando contigo y conversar acerca de esta gran empresa, de mi experiencia, de nuestra experiencia como familia venezolana emigrante. Dispuestos a seguir adelante con este nuevo proyecto que consideramos es bastante oportuno e interesante.

ILR: Muchas gracias por colaborar con nosotros. Hoy hablamos un poco de ti. ¿Nos puedes ayudar a entender tu perfil como emprendedora y de dónde venís?

Magda: De Venezuela. De una familia de dos: mi esposo y yo. Mi esposo es socio de una empresa transnacional de consultoría y está a punto de jubilarse. Y bueno, siempre pensamos que nuestra jubilación iba a ser viajar de nuestros ahorros, de todo nuestro esfuerzo (…) en vista de la situación que se está presentando en Venezuela, ya estábamos un poco preocupado de si quedarnos en el país o no, y bueno, vimos una opción de venirnos a España ya que tenemos papeles porque mi esposo es ciudadano español y mis hijos también.

“Me gustó el concepto una vez que vinimos a visitarlos en vacaciones y le pregunté a la dueña si el negocio era rentable, porque una cosa es lo que te dice Internet y otra cosa es lo que personalmente la gente mira”

Me puse a buscar en internet qué opciones había de negocios rentables y que no sean estar atendiendo y, realmente me salió lavanderías auto de autoservicio. Entonces mis hijos que, se vinieron primero, vivían cerca de una pequeña lavandería, me gustó. Me gustó el concepto una vez que vinimos a visitarlos en vacaciones y le pregunté a la dueña si el negocio era rentable, porque una cosa es lo que te dice Internet y otra cosa es lo que personalmente la gente mira. De verdad que le agradezco a mi compañera.

Ella tiene cuatro lavanderías aquí en Las Palmas de Gran Canaria y, ha sido de gran apoyo. Después de eso fui y me dio el contacto del señor Francisco Navarro, el cual también nos explicó todo lo que es el proceso. Entonces, bueno, así fue. Unas vacaciones en diciembre – enero ya estábamos dando la inicial para una lavandería. Digamos que nos enamoró el concepto.

(…) arrancamos con el proyecto. Dejamos a nuestra hija a cargo del negocio. Básicamente de acuerdo con lo que me explicó mi compañera, se atendía por la aplicación. Y bueno, una visita diaria para la limpieza. Y obvio, al principio también atender al público para que aprenda como es el manejo de la lavandería.

Nuestra hija decidió emigrar a Madrid y yo me tuve que venir a tomar posesión del negocio (…) vino la pandemia y me estoy dedicando de lleno a él.

Esa es nuestra historia como emigrantes, agradezco todo el soporte técnico de modelo de negocio que hemos tenido; pues mi esposo tenía las bases, ya que es asesor a empresarios, pero no es lo mismo asesorar que tener un negocio.

“Consideramos que este es un negocio, bastante asertivo, en el sentido de que no tienes costos de personal. Entonces es uno de los puntos importantes, (…) te puedes dedicar tiempo libre y es relativamente fácil de manejar, porque la tecnología y el soporte que presta la empresa Speed Queen es bastante fácil de manejar.”

ILR: ¿En qué isla estáis?

Magda: Las Palmas de Gran Canaria.

ILR: Y ¿qué buscas entonces en tus proyectos como empresaria? Me explicaste que ha sido todo empujado por una coyuntura, digamos, política migratoria. ¿Tenías objetivos de negocio propio en términos de rentabilidad, de valor absoluto, de negocio que querías alcanzar o cómo fue?

Magda: No, honestamente no, teníamos la jubilación de mi esposo en los Estados Unidos, para vivir de nuestros ahorros, vivir cómodamente en Venezuela. Pero en vista de la coyuntura (…) fuimos buscando alternativas de las cuales pudiésemos vivir. Porque ya nuestros hijos, cada uno tiene su vida hecha, pero nosotros no. Entonces básicamente buscamos un negocio que fuese rentable, accesible y que tuviera disponibilidad de tiempo para pasar la vida que nos queda relativamente en paz, que es lo que cada uno busca, la paz.

“Mira, me enamoré de Speed Queen desde que mi amiga mi compañera me habló de la marca. También investigué y vi que eran máquinas que tiene muchísimos años en el mercado de gran calidad. Inclusive un amigo en Venezuela me comentó que su padre tuvo una lavandería y era de Speed Queen y tenía 30 años y jamás las reparó”.

ILR: Claro, ya me imagino. No me has contad, ¿por qué te decantaste por Speed Queen al final?

Magda: Mira, me enamoré de Speed Queen desde que mi amiga me habló de la marca. También investigué y vi que eran máquinas que tiene muchísimos años en el mercado de gran calidad. Inclusive un amigo en Venezuela me comentó que su padre tuvo una lavandería y era de Speed Queen y tenía 30 años y jamás las reparó. Son tan buenas como un gato. Salieron del mercado por obsoletas, pero no por lo que no sirviesen.

Entonces eso te da una garantía de que es calidad. Eso te permite tener tranquilidad de que son unas máquinas que en cinco años no se te van a dañar. Pero sí investigué e investigué que son máquinas que tienen mucho tiempo en el mercado y realmente son duraderas. Entonces eso es uno de los factores también que consideré.

ILR: Ahora que tienes tu lavandería desde hace más de un año, en tu opinión, ¿cuáles son los factores claves de éxito para rentabilizar tu lavandería más rápidamente?

Magda: El primer factor que yo considero es el costo del alquiler. El alquiler es clave para rentabilizar rápidamente el negocio. Y el segundo factor, que debe haber una atención de algunas horas, para que la gente la gente conozca el concepto y genere confianza.

También la cultura del secado ya que el secado es sumamente económico. Cuando la gente se quiere llevar la ropa mojada yo le digo: mire, por 2 € usted se lleva su nórdico o su ropa, la dobla y la guarda (…) Yo les vendo la lavandería, lo divino que secarse el cuerpo con una toalla suave y no secada por el sol.

Es importante estar los primeros meses en la lavandería para que ya después ella misma camine. Y claro, el boca a boca de tus clientes, que también van a ir dándole ese empuje a la lavandería.

ILR: ¿Y cómo funciona tu lavandería después de un año?

Magda: Muy bien, muy bien (…) porque desde que el comercial me dijo, mira siempre los primeros meses hay que esperar a que la gente se familiarice, acuérdate que también aquí no hay un clima, digamos de frío, muy rara vez llueve.

Dependemos también mucho del turismo. Y acuérdate que el turismo por la pandemia aflojó. Yo tenía clientes que venían de península, que se quedaban en los hoteles y venían a lavar semanalmente su ropa. Estoy en un barrio que la gente es trabajadora, entonces mucha gente está en ERTE. También me bajó por eso. Pero algo positivo que tengo es que tengo muchos, muchos edificios que se están haciendo y hoteles que se están desarrollando.

ILR: Muy bien, gracias. ¿Tienes trucos o buenas prácticas que aplicas dentro de tu lavandería para que funcione? Por ejemplo, tú me decías que te quedabas un poco en la lavandería, hablabas con ellos para animarles a secar, para que prueben como mínimo una experiencia distinta.

Magda: Otros trucos es que tengo algunos productos especiales para las manchas, que están fuera de las máquinas. Eso le gusta a la gente. Sabes, como: “mira, vamos a echarle un poquito y se le quita la mancha”. Eso creo que también es ese adicional de atención.

Otro que le gusta a la gente es que los atiendo por teléfono, los asesoro yo (…) Y en los comentarios en Google son muy asertivos: “Gracias a Dios que la señora es muy amable”, tal, tal, tal.

ILR: ¿Cómo ves el futuro para tu lavandería?

Magda: Yo creo que lo veo bien. Tengo mucha fe, mucha esperanza. No soy una persona negativa.

ILR: ¿Para ti la tecnología es un factor clave? ¿Es muy importante proporcionar esta esta experiencia un poco de última generación a tus clientes?

Magda: Yo creo que sí, porque a pesar de que hay personas mayores que se resisten yo les digo que es muy fácil. Sí creo que la tecnología es muy fácil y la gente aprende rápido.

Sí, sí. Aparte estas son con la pantalla táctil. Y son muy intuitivos, porque todo lo que van a la máquina pinchan el verde y automáticamente la máquina arranca.

ILR: Ya estamos casi terminando, sólo me queda una pregunta ¿te animarías a abrir otra lavandería?

Magda: Sí, pero no. Después que pase la pandemia, honestamente sí me animaría, porque ya tengo todos los elementos, ya tengo todos los trucos.

ILR: Magda, muchísimas gracias por compartir tu experiencia con nosotros hoy. Esperamos que tu negocio siga creciendo y nos quedaremos atentos, gracias por escucharnos y para más episodios os esperamos.

Magda: Gracias a ti, Inés, por tu entrevista.